Servicios de SIXT disponibles en Praga
Además de poder reservar un moderno coche de alquiler en Praga, con SIXT podrá personalizar su contrato añadiendo un conductor adicional para turnarse al volante con su pareja, sillas infantiles si viaja con niños pequeños o kilometraje ilimitado para viajar sin restricciones por la República Checa. En cuanto a la flota disponible, en nuestras oficinas encontrará monovolúmenes pensados para viajes en grupo y familias, todoterrenos ideales para rutas invernales, compactos económicos para explorar la ciudad y cupés para disfrutar de las mejores prestaciones. Si desea encontrar nuestras mejores ofertas, consulte nuestras promociones para alquileres de fin de semana, semanales o mensuales para viajes más largos.
Datos que debe tener en cuenta antes de alquilar un coche en Praga
En nuestras sucursales de Praga podrá alquilar coches a partir de los 18 años. A los conductores menores de 23 años se les factura una tasa adicional por conductor joven.
GPS, sillas infantiles, protecciones sin franquicia, conductor adicional, asistencia en carretera, kilometraje ilimitado, etc.
Audi, BMW, Land Rover, Mercedes-Benz y Jaguar son solo algunos de nuestros fabricantes premium disponibles en Praga a precios irreSIXTibles.
Qué hacer en Praga
Con un coche compacto de SIXT podrá aprovechar al máximo su estancia y descubrir todos los atractivos de Praga, además de realizar algunas excursiones por los alrededores. Desde nuestras diferentes oficinas es muy sencillo visitar el centro, donde se encuentran algunos puntos de interés turístico como la plaza de la Ciudad Vieja, el Ayuntamiento o la Torre de la Pólvora, además de, por supuesto, el Castillo de Praga. Aproveche para subir hasta el Monte Petrin, a unos 10 km, para presenciar una espectacular panorámica de la capital checa.
Qué hacer en Praga en invierno
Praga es famosa por sus coloridos y pintorescos mercados navideños. Además, si visita la ciudad en invierno, puede aprovechar para hacer otros planes, como una excursión hasta el Memorial de Terezín, a solo 60 km, o al castillo de Karlštejn, a unos 50 km. Y, por supuesto, refúgiese del riguroso invierno checo visitando interesantes lugares como el Museo de Mozart, ubicado en la espectacular Villa Bertram.