Haigerloch, como otras muchas localidades alemanas, guarda vestigios que nos trasladan a la Segunda Guerra Mundial, vistos hoy desde una óptica neutral y pacífica. Un ejemplo de ello es el Museo Atomkeller, que muestra una réplica del reactor utilizado por los nazis en sus ensayos para conseguir la bomba atómica. La sinagoga judía, visitable, es otro testimonio de los años de la contienda bélica al que se podrá desplazar nada más recoger su coche de alquiler en Haigerloch.