Brest cuenta con una atracción turística ideal para toda la familia. Se trata del Oceanópolis, un enorme parque temático de 9.000 metros cuadrados que, no solo da a conocer toda la fauna marina de la Tierra, también plantea un interesante recorrido didáctico por los diferentes ecosistemas. Además, las costas de Brest resultan ideales para la práctica de múltiples actividades náuticas, entre ellas, surf, kit surf, wakeboard o vela. De hecho, hay una escuela de vela en Brest, donde se imparten cursos para todos los niveles.
Desde Brest puede programar interesantísimas rutas por el noroeste de Francia. Y es que, gracias a su privilegiada ubicación, sus posibilidades son múltiples. Por ejemplo, puede visitar Quimper, la capital del departamento de Finisterre, una población que invita a recorrer sus calles sin prisas, con la idea de conocer a fondo esta joya de Bretaña donde han convivido tantas civilizaciones. La zona histórica de Quimper se halla dividida en tres partes: la ciudad del obispo, la ciudad del duque y el sitio antiguo. Entre sus edificios, destaca la Iglesia Románica de Locmaría y la impresionante catedral de Saint-Corentin, de estilo gótico. Considerada la pinacoteca más rica de la región de Bretaña, el Museo de Bellas Artes es otra visita obligada tras un recorrido por Quimper.
Distancias desde/hacia Quimper
- Aeropuerto de Brest-Bretagne: 71 km, cerca de 50 minutos.
- Centro de Brest: 72, 9 km, aproximadamente 55 minutos.