La estación de Bristol Temple Meads es el perfecto punto para recoger su coche, ya que está muy cerca de todos los lugares de interés en la ciudad. Bristol es una localidad vibrante y sorprendente, por lo que al desplazarse con un coche, se asegurará de no perderse nada. Dedique una jornada para ver los grafitis de Banksy y visitar la torre Cabot, el Bristol City Museum and Art Gallery y el puente colgante de Clifton. Acérquese al Blaise Castle State, piérdase por los innumerables paseos y no olvide tirarse por el tobogán natural, volverá a sentirse como un niño en el Clifton Down. Si lo que necesita es un poco de paz, disfrute de la soledad y belleza del cementerio Arnos Vale. Gracias a su coche de alquiler llegará en pocos minutos a todos los destinos turísticos de la ciudad y disfrutará de más libertad en sus desplazamientos.