El Mar Báltico y el Mar del Norte dejan su influencia en el estado de Schleswig-Holstein. La brisa fresca, los infinitos diques, las playas, las dunas y la naturaleza en estado puro le esperan en este destino vacacional. La ciudad más importante es la capital, Kiel. Otras ciudades destacadas son Lübeck y Flensburg.
Naturaleza de Schleswig-Holstein
En las costas del Mar Báltico, los acantilados y las playas de arenas blancas encandilan a los visitantes, y tierra adentro, los preciosos lagos, integrados en un paisaje suave de colinas, despliegan sus encantos.
Los numerosos diques y el Mar de Wadden, Patrimonio Natural, albergan multitud de hábitats que van cambiando en función de la marea, formando estuarios, marismas, playas y dunas que acogen a múltiples especies de vegetales y animales, entre ellos, grandes mamíferos marinos.
El ducado de Lauenburgo, el distrito más meridional del estado, con extensas superficies boscosas y abundantes lagos, ofrece propuestas muy variadas a los amantes de la naturaleza. Mientras que las ciudades de Schleswig-Holstein fascinan por su carácter marítimo, sus históricos edificios, su extensa oferta comercial y sus variopintos atractivos culturales.
Monumento Naval Laboe
A unos 20 kilómetros de Kiel se encuentra el Monumento Naval Laboe, una gran torre de 85 metros de altura que se erige a orillas del mar Báltico. Junta a esta, hay un submarino de la Segunda Guerra Mundial, que es el único modelo de sus características que queda en el mundo. La arena fina y las aguas cristalinas de la costa, donde es frecuente ver a surfistas, es otro de los alicientes del lugar.
Parque Nacional del Mar de Frisia
El Parque Nacional del Mar de Frisia de Schleswig-Holstein, declarado Patrimonio de la Humanidad, invita a pasear por las salinas, a disfrutar de terapéuticas sesiones de talasoterapia y a emprender excursiones a las islas Halligen, que desaparecen y aparecen en las aguas del mar del Norte. Se trata de un fascinante enclave repleto de playas, dunas y una fauna muy singular.