Baden Wurtemberg es el tercer estado alemán tanto en población como en superficie. La gran variedad de paisajes, el buen clima y la hospitalidad de sus gentes le han convertido en uno de los destinos más visitados del país. Y es que, además de ser un estado con una economía próspera y emergente, Baden Wurtemberg es también rico en bellezas naturales y urbanas. Son muchos los viajeros que visitan su hermosa capital, Stuttgart, la extraordinaria Karlsruhe o Mannheim, con su gran puerto fluvial. No hay que olvidar la fascinante Selva Negra, el Lago de Constanza y los valles de los ríos Rin, Neckar y Danubio.
La Selva Negra
Si aterriza en el aeropuerto de Karlsruhe, estará aproximadamente a una hora en coche de Friburgo, una de las ciudades más meridionales de Alemania, cuyo término municipal comprende el pico Schauinsland, uno de los más altos de la Selva Negra. Esta animada ciudad se distingue por su clima soleado y cálido, y su casco antiguo recibe cada año unos tres millones de visitantes. A poco más de una hora de Stuttgart, a los pies de la Selva Negra, se encuentra Baden-Baden, con su encanto particular y su distinguido estilo de vida. Esta ciudad balneario es la puerta de acceso al Parque Natural de la Selva Negra, constituyendo un magnífico punto de partida para emprender excursiones y viajes en pleno contacto con la naturaleza.
En las inmediaciones de la ciudad de Stuttgart nace el parque natural del Bosque de Suabia y Franconia, con su amplia oferta de actividades relacionadas con la naturaleza y la cultura. Las propuestas para los visitantes abarcan desde viñedos mediterráneos y praderas hasta gargantas abruptas en tranquilos bosques, pasando por antiguas fronteras romanas (Limes), declaradas Patrimonio de la Humanidad. También tendrá la oportunidad de descubrir la artesanía tradicional en antiguos molinos harineros y en almazaras.
Lago de Constanza
En medio de los extraordinarios paisajes que ofrecen los Alpes, se halla el Lago de Constanza, un lago de más de quinientos kilómetros cuadrados que ocupa territorio de tres países: Alemania, Austria y Suiza. Sus aguas de color verde esmeralda y la numerosas islas que alberga constituyen una parada obligatoria para los viajeros que visitan Meersburg, un encantador pueblo que alberga múltiples construcciones históricas.
Cascadas de Triberg
En el distrito de Selva Negra-Baar, concretamente, en los alrededores de la ciudad de Triberg, se extienden bosques profundos de abetos, y fluye el río Gutach, en el que se han formado una serie de cascadas de más de 160 metros de caída, las más altas de la Selva Negra, las cuales se han convertido en una gran atracción turística y en una interesantísima ruta con un coche de alquiler.